«El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo; la cual es la más pequeña de todas las semillas, pero cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, de tal manera que vienen las aves del cielo y hacen nidos en sus ramas». (Mateo 13, 31-32)
¿Conoces la semilla de mostaza? Es más pequeña que la punta de un alfiler; de entre todas las semillas es la menor en tamaño, pero cuando crece se convierte en la más grande de todas las plantas hasta convertirse en árbol, y sólo necesita de tiempo y de las condiciones climáticas necesarias para que fructifique.
¿Qué nos quiere decir Jesús con esta parábola? ¿Cómo podemos llevar este relato al nivel de fe? En esta parábola Jesús compara el Reino de los Cielos a una semilla de mostaza, aduciendo no tanto a su tamaño sino como a su potencial.